El Refugio Neumeyer fue durante años un centro emblemático de actividades de montaña en el Valle del Challhuaco, dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi, a pocos kilómetros de San Carlos de Bariloche, Argentina. Nombrado en honor al geólogo Hans Neumeyer, se ubicaba a unos 1.200 metros sobre el nivel del mar, rodeado de bosques de lengas, coihues y una rica biodiversidad andina.
Este refugio ofrecía una experiencia única de contacto con la naturaleza y funcionaba como punto de partida para caminatas, recorridos con raquetas de nieve, esquí de fondo y actividades educativas. Era especialmente valorado por su accesibilidad, lo que lo convertía en una opción ideal para familias y visitantes de todas las edades.
En 2016, el edificio principal fue destruido por un incendio, marcando un momento triste para la comunidad local y los amantes de la montaña. Sin embargo, el espíritu del lugar no desapareció. En su lugar, se instalaron domos ecológicos que hoy reemplazan al antiguo refugio, ofreciendo una experiencia sustentable y confortable en plena naturaleza. Estos domos permiten a los visitantes pernoctar en el corazón del valle, con un bajo impacto ambiental y manteniendo la conexión íntima con el entorno natural.
El Valle del Challhuaco sigue siendo un destino imperdible para quienes buscan tranquilidad, caminatas entre bosques patagónicos, vistas alucinantes y la posibilidad de avistar especies endémicas como el sapo de Challhuaco. La renovación del espacio con los domos es un símbolo de resiliencia y de compromiso con el turismo sustentable en la región.