El Cementerio del Montañés está ubicado en inmediaciones de la pared norte del Cerro López y a poca distancia de la ruta del Circuito Chico. Su origen se remonta a la cesión de tierras destinadas a tal fin por parte del Municipio de Bariloche en el año 1964, y los primeros montañeses en ser enterrados allí fueron Gregorio “el Negro” Ezquerra y Wenceslao Clerch. Desde entonces el cementerio ha crecido y se ha convertido en un lugar verdaderamente emblemático, donde descansan en paz aquellas personas que amaron el montañismo.
Todos los años, el 5 de agosto, al conmemorar el día del montañés, luego del acto en el Centro Cívico, una comitiva integrada por miembros del Club Andino Bariloche, de la Escuela Militar de Montaña, y otras autoridades se reúne para rendir homenaje a los andinistas y escaladores que yacen en el lugar.